La soledad en la tercera edad: ¿Cómo afecta a nuestros adultos?

La soledad en la tercera edad es uno de los grandes enemigos del bienestar de los adultos  mayores. La amargura y la tristeza roban las ganas de vivir a muchas personas mayores que se sienten solas. En este sentido, conviene tener en cuenta que la sociedad y el modelo de familia han dado un giro importante en las últimas décadas. Por ello, conviene hacer autocrítica. 

Es importante entender que la soledad significa sentirse solo independientemente de la cantidad de contactos sociales. El aislamiento social es la falta de conexiones sociales. El aislamiento social puede causar soledad en algunas personas, mientras que otras pueden sentirse solas sin estar socialmente aisladas.

El aislamiento social es un problema grave y habitual en la vejez. Muchos ancianos sienten falta de compañía, afecto y apoyo, que se agrava por la carencia de relaciones sociales de calidad. Esto aumenta el retroceso mental e inmunitario durante esta fase de la vida, a pesar de haber mantenido una vida social normal durante las etapas vitales anteriores.

Identificando la soledad

La soledad se puede presentar en diferentes formas que requieren respuestas, esfuerzos y estímulos diferentes. Podemos catalogar la soledad en 3 diferentes tipos:

Soledad emocional: ocurre cuando alguien siente la falta de relaciones íntimas. Soledad social: es la falta de contacto satisfactorio con miembros de la familia, amigos, vecinos u otros miembros de la comunidad.

Soledad colectiva: es el sentimiento de no ser valorado por la comunidad en general.

Identificar el tipo de soledad que sienten nuestros ancianos es clave para poder promover relaciones de calidad  lograr que nuestros esfuerzos para ayudarlos sean lo que realmente necesitan.


Sentirse aislado de los demás puede interrumpir el sueño, aumentar la presión arterial, incrementar el aumento matutino del cortisol (hormona del estrés), alterar la expresión génica de las células inmunitarias, aumentar los niveles de depresión y reducir el estado de bienestar subjetivo general.

Riesgos de la soledad en nuestros mayores

  • El sentimiento de soledad extrema puede aumentar en un 14 % las probabilidades de muerte prematura de las personas mayores, según una investigación realizada por John Cacioppo, profesor de psicología en la Universidad de Chicago y uno de los principales expertos sobre la soledad en Estados Unidos
  • El aislamiento social aumenta significativamente el riesgo de una persona de morir prematuramente por todas las causas, un riesgo que podría rivalizar con el del tabaquismo, la obesidad y la inactividad física.
  • El aislamiento social se asoció a un aumento de casi el 50 % del riesgo de demencia.*
  • Las relaciones sociales escasas (caracterizadas por el aislamiento social o la soledad) se asociaron a un aumento del 29 % del riesgo de enfermedad cardiaca y a un aumento del 32 % del riesgo de accidente cerebrovascular.*
  • La soledad se asoció a mayores tasas de depresión, ansiedad y suicidio.

¿Sabes como se sienten los adultos mayores en tu familia? Quizá es hora de conversar y convivir más.

Un video a modo de reflexión:

* National Academies of Sciences, Engineering, and Medicine. 2020. Social Isolation and Loneliness in Older Adults: Opportunities for the Health Care System. Washington, DC: The National Academies Press.

Publicado por ASCADACR

Organización sin fines de lucro, en pro de familiares y cuidadores de pacientes con Alzheimer y enfermedades afines.

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